POSADAS. La Feria del Libro Posadas fue escenario, este jueves 29 de mayo, de un emotivo y significativo hito cultural: la presentación de Platero Ha Che. Se trata de la edición bilingüe guaraní-castellano del clásico universal Platero y Yo de Juan Ramón Jiménez. El evento, que congregó a figuras del ámbito cultural de España, Paraguay y Argentina, celebró la unión de lenguas y el fomento de lazos transfronterizos a través de la literatura.
El gobernador, Hugo Passalacqua, mantuvo una reunión, antes de la presentación, con las autoridades de la Asociación Cultural Iberoamericana y aseguró que “desde el Gobierno de Misiones hacemos un gran esfuerzo para sostener y fortalecer nuestras bibliotecas públicas”, tanto desde lo institucional como con el compromiso y el trabajo voluntario de muchas personas que las mantienen vivas en cada rincón de la provincia. “Por eso acompañamos esta entrega con convicción: estas ediciones llegarán a las escuelas y a las bibliotecas públicas de Misiones, donde serán verdaderamente valoradas como herramientas culturales y educativas”, agregó.
Puentes culturales desde Huelva hasta Misiones

Jaime de Vicente Núñez, presidente de la Asociación Cultural Iberoamericana (ACI), explicó la misión de su organización, compuesta por 55 personas. Los miembros son de Huelva y de países iberoamericanos, entre ellos dos argentinos. Uno es Pedro Solans, que generó el vínculo entre la ACI y Juan Ramón Fariña (responsable de traducir al guaraní la obra literaria). La otra es Sandra Olivero, profesora de Historia de América en la Universidad de Sevilla.
La ACI se embarcó en “proyectos tan apasionantes como la edición bilingüe en versiones con idiomas de países iberoamericanos e idiomas originarios”, afirmó Núñez. Además, se buscó establecer “vínculos entre los pueblos de los dos países” a través de una cultura que integre tanto lo europeo como lo originario.
La decisión de traducir Platero y Yo al guaraní surgió de la convicción de la ACI de que la cultura es un camino para el entendimiento mutuo. La obra, la segunda más traducida del español después de El Quijote, ya había sido vertida al quichua hace una década por la misma entidad. Este paso marcó un precedente en la traducción a idiomas originarios americanos. Núñez manifestó que anhela que este proyecto sea el inicio de una relación fructífera con Misiones, con la que aspiran a continuar la obra.
La emoción del espíritu guaraní en Platero y yo

Juan Ramón Fariña, director del equipo de traducción al guaraní, compartió la emoción de ver el Avañe’ẽ, el idioma guaraní, “impreso e hilvanado en las poesías de esta obra literaria”. Para Fariña, la verdadera trascendencia reside en que “el espíritu guaraní está vivo en este relato”. Consideró que este trabajo representa un gran respaldo para la historia de la lengua originaria.
El desafío de la traducción, propuesta por el ministro de Cultura, Joselo Schuap, fue asumido con entusiasmo pese a su complejidad. Fariña detalló que el trabajo se realizó durante la pandemia. Eso implicó una coordinación a la distancia con Huelva por medio de videollamadas, llamadas telefónicas y mensajes de audios. La tarea consistió en un “trabajo profundo de reemplazar algunos términos, conceptos y líneas a la mínima expresión para traducirlos a un guaraní depurado”, detalló Fariña. Así se logró representar la idea original de Juan Ramón Jiménez.
Hacia una gestión cultural sin fronteras

El secretario de Estado de Cultura puso en valor la presentación de Platero Ha Che, al considerar que “nos multiplicamos en riqueza porque podemos tener un libro en dos idiomas”. En ese contexto propuso trabajar activamente con los hermanos paraguayos para impulsar la traducción de obras literarias universales y locales al guaraní.
El secretario de Cultura reafirmó el compromiso del Gobierno provincial con la continuidad de espacios como la Feria del Libro de Posadas, a la que calificó de necesaria e instó a no parar. Hizo un llamado a forjar un “movimiento cultural guaraní” para que “el libro llegue a cada biblioteca y a cada escuela”. Al finalizar su intervención, agradeció a Jaime de Vicente Núñez y su equipo por el “amor y un convencimiento” que los llevó a realizar el viaje para estar en Posadas.
Este evento en la Feria del Libro de Posadas celebra la llegada de Platero y Yo al corazón del guaraní. También sienta las bases para una política cultural que busca trascender fronteras y unir pueblos y lenguas a través de la literatura.
Entrega de ejemplares a distintas organizaciones

2.000 ejemplares del libro se distribuirán en escuelas bilingües de Misiones, Corrientes, Chaco, Formosa y Paraguay. La impresión de los ejemplares se realizó por aportes del Gobierno de la provincia de Huelva, que es coeditor del libro. La Junta de Andalucía hace posible que los ejemplares lleguen a la Argentina y el gobierno de Misiones será responsable de la distribución en la región.
Al finalizar la exposición se realizó la entrega simbólica de ejemplares a la Municipalidad de Posadas, recibido por la secretaria de Cultura y Educación Mariela Dachary; al Servicio Provincial de Enseñanza Privada de Misiones, recibido por el presidente Luis Alberto Bogado; Leticia de Rosario Machado de la biblioteca de Itaembé Miní; Elsa Inés Tañski vicepresidente de la Federación Misionera de Bibliotecas Populares; y al Consejo General de Educación de Misiones
Sobre Juan Ramón Jiménez
Juan Ramón Jiménez (Moguer, Huelva, 23 de diciembre de 1881 – San Juan de Puerto Rico, 29 de mayo de 1958) fue un poeta español. Gran parte de su vida transcurrió en Puerto Rico, lugar al que se exilió al inicio de la guerra civil española. En 1945 visitó la Argentina junto a su esposa, Zenobia Camprubí, y fue recibido con honores. Ganó el Premio Nobel de Literatura en 1956 por el conjunto de su producción literaria, entre la que destaca la obra lírica en prosa Platero y yo.
Junto a Rubén Darío son considerados los renovadores de la poética, de la poesía en español del siglo XX. Su esfuerzo por conseguir la pureza, la desnudez y la esencia de la palabra lo convirtió, a estas alturas del siglo XXI, en un referente absoluto. Su obra revive, junto al personaje entrañable del burrito Platero, en una edición Guaraní – Español.