Durante cuatro días consecutivos, Aristóbulo del Valle vivió a pleno una verdadera fiesta a cielo abierto de la creatividad y el arte, con la realización de la primera edición de la Bienal Cainguás. Este evento inédito en la provincia, congregó a escultores y escultoras que compartieron el proceso creativo y productivo de sus obras en vivo, transformando madera y hierro con técnicas libres, dando vida a diversas creaciones.
El encuentro tuvo como epicentro a la Plaza Libertad, espacio público dotado de un notable encanto natural, acorde con el espíritu de una propuesta pionera, que además de poner en valor el talento artístico, promueve el cuidado de la biodiversidad en la región. La I Bienal Cainguas se realizó del 12 al 15 de diciembre en Aristóbulo del Valle, organizada por la Municipalidad de Aristóbulo del Valle, en colaboración con la Dirección de Turismo y la Secretaría de Estado de Cultura de Misiones. También participaron la Fundación Urunday y la Facultad de Artes y Diseño de la UNaM, ofreciendo capacitaciones y asesoramiento.
En esas cuatro jornadas, una gran cantidad de vecinos y turistas pudieron disfrutar de la labor de los escultores, accediendo además a una variada programación artística y cultural.
Premios y reconocimientos
El jurado de la Bienal seleccionó como ganadora a la escultura “Ritmo de lo Vivo”, creada por Francisco Gustavo López. Esta obra, destaca por sus formas orgánicas entrelazadas que invocan el equilibrio y la armonía del ecosistema misionero. López explicó que su inspiración surgió del bioma como un espacio cultural que invita a reflexionar sobre la conexión entre la naturaleza y sus habitantes.
Por otro lado, el Premio del Público fue otorgado a “Resiliencia”, de Tanya Micaela Muller, pieza que simboliza la fortaleza de la naturaleza para resistir a las agresiones y contextos adversos que la atraviesan.
Así mismo, la artista Yohana Pedrozo recibió una Mención Especial por “Paréntesis”, una propuesta que combina elementos naturales con conceptos lingüísticos, reflejando sutiles mensajes que el entorno nos transmite. El proceso de selección incluyó más de 20 proyectos, evaluados bajo criterios de autenticidad y originalidad.
Jornadas culturales
El evento también ofreció un espacio educativo con charlas sobre conservación ambiental, impartidas por especialistas, y talleres para niños enfocados en el diseño de máscaras con elementos naturales. Las jornadas culturales incluyeron recitales en vivo que culminaron el sábado por la noche con la presentación de “Los Núñez”.
Con el apoyo de jurados provenientes de la Bienal del Chaco y la Fundación Icomos Argentina, el evento promete consolidarse como un punto de encuentro bienal para escultores y amantes del arte, ampliando la oferta cultural de la provincia y fortaleciendo los lazos entre sus habitantes y visitantes.