El clima inestable no fue impedimento para la exitosa realización de “Siga el baile”, un festival organizado por la Asociación de Músicos Bailanteros (AMB) y la Asociación de Músicos Unidos de Misiones (AMUM, que contó con el apoyo y la logística del Ministerio de Cultura de la Provincia y cuyo objetivo fue celebrar el regreso de los eventos musicales con baile.
La necesidad de que más de 1500 familias de los músicos “bailanteros” fue el motivador, y la actualidad epidemiológica en la provincia la que permitió que sucediera. Porque a pesar de la apertura gradual de las restricciones sanitarias, las bailantas fueron las que más sufrieron el parate laboral.
De esta manera, el Ministerio de Cultura brindó el apoyo logístico para que ayer domingo, en las instalaciones del club Centro de Cazadores, seis conjuntos musicales animaran una jornada que comenzó al mediodía con la llegada de los primeros comensales y aún bajo la constante amenaza de lluvia, y se extendió hasta el atardecer, en un clima de camaradería y festividad que se extrañaba. Familias, parejas, grupos de amigos, personas de todas las edades, muchas de ellas “empilchadas” con sus atuendos gauchescos, se acercaron en buen número a disfrutar de la propuesta, que incluyó además, gastronomía y un vacunatorio contra el Covid-19 a cargo de promotoras de salud.
“Llegamos temprano con mi señora y mis cuñados. Estamos acostumbrados a las bailantas, es nuestra alegría, nuestra forma de pasar el fin de semana, lejos de los problemas. Es algo que es parte de nosotros y nos une, disfrutar la música bailando. Fueron dos años muy duros, y esta vuelta de la alegría del baile popular nos llena de emoción”, expresó Fausto Gómez (54), uno de los bailarines presentes.
Le tocó a Maru Cumbiera y su Grupo, abrir el festival con una tanda de canciones del género tropical, que empujaron a la pista a las primeras parejas de la tarde. Todavía muchos comensales estaban almorzando, pero de a poco se presentía que con el transcurrir de los minutos, se iba a tener que agrandar el radio de la pista. Luego llegó el turno de Juancito y la Topadora Chamamecera, y el Grupo W, conjuntos que desplegaron un arsenal de clásicos chamameceros, sertanejo y valerones .
“Después de tanta dificultad, este es un momento en el cual esa necesidad espiritual que tiene la gente de bailar, ya se puede satisfacer. La realidad epidemiológica hoy nos lo permite y podemos darnos este gusto gracias al esfuerzo que hicimos en su momento como pueblo”, señaló el ministro de Cultura Joselo Schuap, en relación a este evento que, entre otros requisitos de participación, solicitó a cada persona ingresante, la presentación del pasaporte sanitario.
El Grupo Los Foracks, Agustín Rodríguez y como plato fuerte José Medina y Musical Bohemios, musicalizaron el resto de la tarde, y aunque la pista quedó encendida y las ganas de seguir hasta que las velas no ardan prevalecían, el festival llegó a su fin sin inconvenientes, marcando el inicio de un nuevo y esperado tiempo: el de volver a bailar.